Fascismo entonces, fascismo ahora Gyorgy Lukács. (18985-1971) Pensador marxista húngaro. (del Testamento Político)*

“Esta situación puede ser brevemente descripta de la siguiente manera: el poder militar del fascismo ha sido aniquilado en la guerra. Sin embargo, el desarrollo de la postguerra muestra que su destrucción política, organizativa y, sobre todo, ideológica, es mucho más lenta y difícil de lo que muchos pensaban. Políticamente, porque algunos hombres de Estado, que acostumbran llamarse enfáticamente democráticos, consideran a los fascistas como una reserva, los cuidan y los apoyan. Y, también ideológicamente, el fascismo se muestra mucho más resistente de lo que muchos se lo habían representado después de la demoledora derrota de Hitler.

Debo confesar que no me cuento entre los que están sorprendidos y desilusionados por este desarrollo. Ya antes de la guerra y durante la guerra, la base de mis artículos fue que el fascismo de ninguna manera era una manifestación históricamente aislada, ni una repentina irrupción de la barbarie en la civilización europea. El fascismo, como visión del mundo, es antes bien una culminación ciertamente cualitativa de teorías epistemológicamente irracionalistas, social y moralmente aristocráticas, que en la ciencia oficial y no oficial y en el periodismo científico y pseudo científico juegan, desde hace muchas décadas, un papel importante. Como aquí existe una asociación orgánica, los seguidores intelectuales del fascismo pueden replegarse fácilmente, pueden sacrificar a Hitler y a Rosenberg y – para un nuevo avance bajo condiciones más favorables- atrincherarse en la filosofía de Spengler o Nietzche.”


György Lukács (1967): “La visión del mundo aristocrática y la democrática”. Testamento Político y otros escritos sobre política y filosofía. El Viejo Topo, España, 2003, pp. 31-32.